Agile es una filosofía que se aplica en ambientes de incertidumbre y que está basado en hacer experimentos cortos para aprender lo más rápido posible y así entregar con más fiabilidad lo que el cliente quiere. Es decir, Agile es muy útil cuando no puedes predecir lo que va a pasar a medio/largo plazo; en ese caso, lo que se hace en Agile es jugar al «prueba y error», para llegar al fin sin prever cómo llegarás.